Tomando un descanso... {Sel & Nick}

Nos besábamos sin importar qué, sin importar que nos estén mirando o no. Igual, ¿qué importaba? Todo el mundo tenía que enterarse que estaba locamente enamorado de Selena Gómez. Me separé unos cortos milímetros de sus labios y sonreí.
No, yo te amo más.
Al escuchar su respuesta, la seguí por el mar, aún abrazado a ella por su cintura, estaba decidido a no soltarla. Cuando se paró en un lugar del mar, no había nadie y eso me gustaba.
¿Ahora que?
Le pregunté, sonriendo muy cerca de sus labios.

Ambos nos besábamos con muchos ánimos. Y... ¿cómo no hacerlo? Era el momento más feliz de nuestra vida, estábamos en el medio del mar sin nadie que nos mire... ¿Cómo no lo íbamos a disfrutar? Los besos no terminaban ni tampoco las caricias y el amor. Al escuchar su respuesta, le sonreí. No iba a contestar más sobre el asunto, porque sería una graciosa discusión sin fin.
Solo quiero saber lo que quiere mi princesa.
Le dije, lo más caballero y dulce posible en el momento, para luego volver a besarla con intensidad al recibir su beso en mis labios.

Al escuchar su respuesta, sonreí. Era extraño que quisiera un beso, porque habíamos estado besándonos todo este rato sin parar. Pero en fin, no le negaría lo que me pedía. Después de sonreír porque me había robado un beso y, además, comenzó a nadar alrededor mío, la atrapé con mis brazos, levantándola un poco más de la superficie del mar y dándole un beso en los labios suave, tierno y a la vez intenso y pasional.
¿A mi princesa le gusta el beso?
Le pregunté, separándome un poco de sus labios y, conriendo, la miré a los ojos.

Al escuchar su respuesta, le sonreí. ¿Acaso podía ser más perfecta? Hermosa, dulce, graciosa... No tenía ningún defecto, al menos para mí. Cuando noté que nuevamente daba vueltas alrededor mío y que me miraba a los ojos, le sonreí nuevamente, aunque este vez de felicidad. Le tiré un beso con mis manos, divertido.

Al recibir su beso en el aire, sonreí.Luego, cuando me tiró agua al rostro, reí al igual que ella.
Si, me gusta el agua...
Le dije, sin dejar de reir. Luego, al recibir su beso, la abracé por la cintura y le dí otro beso, más largo e intenso que el que ella me había dado a mi. Cuando comenzó a flotar en el agua, la miré tiernamente.

Luego de un rato que ella llevaba flotando, y ya estaba concentrado en mis planes dentro de mi cabeza. ¿Qué planeaba? Bueno, parte de mi vida... Principalmente, planeé lo que haría con Sel cuando se ponga el sol o si llegara a llover.
¿Quieres ir a tomar sol a la orilla?
Le pregunté cuando dejó de flotar y me preguntó eso. Llevábamos ya mucho tiempo en el agua y empezaba a hacer un poco de frío.

Al escuchar su respuesta, sonreí de lado, asentí y la seguí hasta la orilla. El agua ya se estaba enfriando y los rayos del sol ya no eran tan fuertes como antes. Al llegar a la orilla, busqué mi toalla y me la puse, al igual que ella. No quería resfriarme. No ahora. Me senté en la arena, para disfrutar del último momento de sol que quedaba del día, luego miré a Sel y le sonreí.

Cuando se sentó a mi lado, sonreí y recosté mi cabeza en sus piernas, para poder seguir mirándola, sonriente.
Nada, ¿por qué?
Le pregunté, extrañado. Era el mejor día de mi vida y quería pasarlo solo con Sel, sin nadie más que ella.

Suspiré al escuchar su respuesta.
Solo estoy algo cansado.
Le dije sonriendo, sin darle importancia al asunto. Luego, al escuchar su pregunta, me encogí de hombros.
Si quieres, puedes ir a tu casa a cambiarte y salimos a la noche o podemos... Comer en mi departamento o en tu casa, como quieras...
Le dije, sonriendo finalmente, mientras seguía observándola.

Vi que suspiro entonces solo sonrei por que no estaba segura de lo que pasara... - Aaaahhhh creo que esta ahora todo claro... - Le dije mientras sonreia y lo miraba, solo habia cerrado los ojos por unos momentos, luego los habri y encongi los hombros. - Hahaha, Claro mejor nos vamos ahorita no crees para que mejor no se nos haga tarde no crees? - Le dije mientras sonreia y seguia mirandolo para ver si nos vamos ahorita.

Asentí al escucharla. Me puse de pie y esperé a que me imitara, mientras me dediqué a contemplar el panoraba, era excelente y había una buena vista, especialmente porque estabamos solos en la playa.

Sonreí al escuchar su pregunta.
Si, claro, pero antes...
Me acerqué a sus labios y la besé una vez más... No podía evitar besarla; la amaba mucho y me encantaba estar con ella.
Ahora sí.
Me separé un poco de sus labios, y la tomé de la mano, para encaminarme con ella.